El tejido polar, un tejido sintético fabricado principalmente con poliéster, es famoso por su calidez y ligereza, por eso es el favorito de los amantes de las actividades al aire libre. Se teje en un material transpirable y ligero que proporciona un aislamiento sustancial sin ocupar mucho espacio. Aquí tienes un resumen de los distintos tipos de tejido polar:
Tejido polar Sherpa: este tipo, que emula la vestimenta tradicional de los sherpas de Nepal, tiene una textura gruesa, esponjosa y de pelo largo que atrapa eficazmente el calor, por lo que es perfecto para climas fríos.
Tejido polar de pelo: caracterizado por su superficie suave y perchada por ambos lados, el vellón de pelo proporciona calor y comodidad constantes y es adecuado para una gran variedad de usos.
Forro polar: conocido por sus propiedades aislantes y duraderas, el forro polar es ligero y de secado rápido. Los amantes del aire libre lo utilizan como capa intermedia.
Tejido polar Teddy: como el tejido polar Sherpa, pero más ligero, el tejido Teddy ofrece una textura suave y acogedora, lo que lo convierte en una excelente opción para jerséis y forros de chaquetas.
Tejido micropolar: esta versión más fina y ligera del tejido polar es ideal para vestir a capas en climas más suaves, ya que proporciona calor sin apelmazar, y es ideal para realizar actividades gracias a su transpirabilidad y flexibilidad.
Tejido polar de rejilla: conocido por su patrón de rejilla, el tejido polar de rejilla destaca por su transpirabilidad y evacuación de la humedad, por lo que es perfecto para realizar actividades. Es ligero y excelente en la regulación de la temperatura corporal.
Cada tejido polar tiene sus propias ventajas, lo que garantiza la combinación perfecta para las aventuras al aire libre o para pasar un día calentito en casa.